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miércoles, mayo 27, 2020

Serie En el último rincón del mundo

1. Un amor perfecto

Un matrimonio de conveniencia que dará lugar a un amor irresistible, un deseo irrefrenable y la felicidad para toda la vida.

¿Puede el dinero comprar la felicidad?

Emilia Larraín Mackenna lo tiene todo: belleza, cerebro y dinero. Y también tiene un gran problema.

Educada, y manipulada, por su abuelo para ser tan exigente y cruel como él, Emilia vive rodeada de lujos, viajes, ropa exclusiva, con empleados que atienden hasta su más mínima necesidad.

Sin embargo, para tomar el control total de su herencia, debe cumplir un pequeño y casi insignificante requisito que Felipe Mackenna dispuso para ella: antes de que cumpla 30 años debe estar casada.

A semanas de que ese día llegue, su problema ha pasado de grande a gigantesco.

Por lo que más ama en el mundo, su hija Carolina, Matías está a punto de quedar en la calle. Tanto su casa como su negocio están muy cerca de ser liquidados por la falta de la hipoteca, pero ni aun así él deja de promocionar lo que podría ser una carrera deportiva brillante... si no fuera por la falta de recursos.

Hasta el día que recibe una oferta irresistible.

2. Después de tantos años

La desaparición de Elizabeth hará que la vida de Cristóbal de un giro radical.

¿Se dará la oportunidad de volver a encontrar el amor?

¿Puede el tiempo borrar los errores y sanar las heridas?

Como abogado, Cristóbal ha visto el mundo y lo comprende tal como es, con todo lo bueno y lo malo. Además, su vida no ha sido un cuento de hadas, ni siquiera con los privilegios que una sólida fortuna familiar pude darle.

Lo malo: perdió a su madre a los quince años y su padre nunca volvió a ser el mismo, dando como resultado un espantoso matrimonio con una mujer que deja en pañales a cualquier madrastra malvada.

Lo bueno: solo era un joven universitario el día que conoció al amor de su vida.

Elizabeth era entonces una prometedora estudiante de medicina, tan feroz y guerrera, como bella e inteligente y Cristóbal no pudo hacer otra cosa que perseguirla sin tregua. Tras una larga, apasionada y tierna relación, lo peor llegó: un día, sin aviso previo, Elizabeth desapareció.

A pesar de todo, Cristóbal no se ha convertido en un hombre amargado o cínico, muy por el contrario. Nunca ha perdido la esperanza de tener una segunda oportunidad.

¿Sería la vida tan generosa con él?

3. El hombre del fin del mundo

Una historia de un amor que nace lento, empezando por una sincera amistad.
Una relación que se va afianzando y que nada ni nadie la puede parar.

Enrique sabe quién es y está orgulloso de ello, de sus orígenes y de su etnia. Él es, auténticamente, un «hombre de la Tierra» y siempre se ha sentido en comunión con la naturaleza a su alrededor, la entiende y la ama, sin importar si es animal, vegetal o mineral.

Por eso, el día que ve un enorme perro huir de su joven dueña, no duda en interponerse en su alocada carrera.

Para Ema, Enrique se ha convertido en el mejor amigo que ha tenido nunca, una pieza fundamental que ocupa un lugar cada vez más preponderante en su vida.

Sabe que no es el típico galán de telenovelas ni un príncipe de cuento de hadas, pero hay algo en él que la cautiva. Tal vez la sabiduría milenaria que trasciende de su profunda voz. Quizás el cálido tacto de sus manos.

¿O serán sus oscuros ojos, llenos de misterios, que la llaman a descubrirlos?

4. Quédate conmigo

¿Puede el mayor problema ser la mejor solución?

Alicia es la más joven y la más alocada de sus hermanos, al menos si se le pregunta a sus padres. Pero ella lo ve de otra manera. A pesar de que respeta sus raíces, tiene mucha esperanza puesta en su futuro, por lo que se considera a sí misma una mujer moderna, libre y espontánea.

Si bien esta última característica a veces la mete en problemas, Alicia no es del tipo de persona que huye de ellos, sino todo lo contrario. Especialmente si el problema es tan atrayente como Agustín.

Aunque Gumucio, Petronelli y Asociados no es la típica firma legal, Agustín, especialista en derecho familiar, está aburrido de recibir al típico cliente, con las típicas justificaciones para su típico actuar, y siente que está a un caso de divorcio de saltar desde la ventana de su oficina en el décimo piso. O, como mínimo, de convertirse en el hombre más cínico del mundo. Así que el día en que Alicia llegó a su vida, fue como una bocanada de aire fresco y muy vigorizante.

Para bien o para mal, Alicia es familia de su socio, por tanto terreno vetado, y enredarse con ella es un problema latente.

Pero ¡qué bien nos sienta a veces meternos en ese tipo de problemas!

miércoles, abril 17, 2019

Serie Quinteto de la muerte

1. Te debo un sueño

Una chica apasionada que persigue sus sueños se encuentra con un amargado y tiránico director de una escuela de danza.

Cuando Francisca sueña, lo hace en grande. No se conforma con ser una buena bailarina. Ni siquiera prima ballerina en su propio país. 

Ella quiere ser la bailarina más grande de su generación, pasar a la historia por su talento, su gracia y estilo.

Ahora que se dirige a estudiar en la que según ella es la mejor academia de danza del mundo, está tan cerca de ver sus sueños hechos realidad que casi puede tocarlos...

Cuando Baran sueña, sabe que es su organismo en reposo alcanzando la fase REM. También sabe que nada pasa en esta vida si no es él quien lo hace pasar, que nada se gana deseando cosas imposibles. Después de todo, su vida no ha sido exactamente fácil.

Un complejo pasado con muchos secretos lo ha llevado a ser el amargado y tiránico director de una antigua y reputada academia de danza...

Hasta que sus mundos colapsan y Francisca comprende que a veces la realidad es mucho mejor que los sueños y Baran acepta que su filosofía está equivocada, que los sueños sí se hacen realidad... si estás dispuesto a pelear por ellos.

2. Eres para mí

Te metes con una y te metes con todas.

Dicen que veinte años no es nada, pero para ellos, diez fueron más que suficientes...

Lo único que Adriana y Juan tienen en común es su mejor amiga, Isabel. Y que trabajan en el mismo taller de mecánica automotriz, propiedad de la familia Soublette. Porque, por supuesto, considerar sus eternas discusiones como algo en común es exagerar.

Ser constantemente apabullada por su perfecta hermana y sus no menos perfectos padres convierte a Adriana en una mujer en apariencia fuerte y guerrera, pero muy acomplejada por su, según ella, menos que agradable apariencia. Si a esa mezcla le sumamos a la hermosísima mejor amiga, el resultado es un camino al desastre.

El siempre tímido y silencioso Juan se siente cada vez más lejano a conseguir lo único que ha deseado toda su vida: a Adriana. El gran problema es que ella no le habla si no es para pedirle cosas relacionadas con su trabajo. Y él no le habla. Punto.

No es que no quiera, es que no puede. Su naturaleza introvertida le juega en contra cada vez que tiene la oportunidad de entablar una conversación con ella, y cuando abre su boca solo salen monosílabos.
Hasta la noche en que, tras una explosiva discusión, descubren que tienen mucho más en común de lo que ellos mismos sospechan.

3. La otra

La fuerza del primer amor se pone de manifiesto en esta historia, cuando el destino quiere que los protagonistas se vuelvan a encontrar años más tarde.

Ella vivía la vida, la gozaba. Él se casaría porque era lo que debía hacer. 

¿El resultado? Un desastre.

La diseñadora de modas Lorena Irribarren sonríe feliz porque sabe que por fin su marca «I de Irresistible» está llegando adonde ella quiere, ya casi no da abasto con todos los encargos que recibe.
Pero cuando llegó hasta su taller Gabriela Matus, una de las señoritas de clase alta más fotografiadas del medio nacional, dejó todo de lado por atenderla.

La mayor sorpresa de Lorena fue el día que se encontró con Gabriela y su novio, ya que no era otro que Antonio, el primer hombre de su vida. El único realmente importante.

Cuando Antonio descubre que la diseñadora tan apetecida es Lorena, sabe que tiene que enfrentar el pasado antes de pensar en el futuro, por lo que una tarde se ve a sí mismo visitando a Lorena en su taller.

Pero la salvaje naturaleza de su pasión y lo profundo de su amor es más fuerte, y sin poder hacer nada por evitarlo, terminan recordando viejos tiempos en la bodega de las telas.

Por cosas de la vida, las amigas de Lorena, su «Quinteto» siempre bromearon a costa de ella llamándola «La Otra». Lo que jamás, ninguna de ellas pensó, ni siquiera por la disipada vida que lleva Lorena, es que era eso justamente en lo que terminaría convirtiéndose.
¿Lo peor? Era la otra de Antonio...

4. Justo a mi lado

La historia de una mujer valeinte, decidida y que luchará por su cuando, en su camino, se cruzará Eduardo.

Isabel creía que podía con todo hasta que, sorpresas de la vida, alguien tiene que ayudarla para salir adelante.

Isabel, una mujer tan bella como práctica, se ha hecho cargo de la empresa familiar después del fallecimiento de su padre. 

Es la responsable, además, de que todos cuantos la rodean se sientan seguros, y es a ella a quien acuden y en quien buscan refugio en tiempos de crisis. Eso es exactamente lo que ha hecho su hermana cuando, tras el accidente de su marido, ha dejado a su cuidado a un niño de menos de un año.

Isabel es capaz de enfrentarse y solucionar cualquier problema por difícil que sea, sin embargo, no sabe cómo tratar y atender a su pequeño sobrino.

Por fortuna, su vecino Eduardo, un hombre moreno, alto y guapo con el que a lo largo de los dos años que llevan viviendo uno frente al otro apenas ha cruzado dos palabras, sí sabe lo que hacer con un bebé... y le ofrece su ayuda.

5. Nada serio

Que nadie se olvide. En el Quinteto de la muerte: Te metes con una y te metes con todas.

¿Qué haces cuando todas tus amigas están casadas y en proceso de ser madres? Pues, te buscas un lindo juguetito.

Durante toda su vida, lo único que Pamela ha querido es que nadie se le acerque lo suficiente como para llegar a conocerla, excepto sus más queridas amigas. 

Nunca ha tenido una relación seria o comprometida. Se ha dedicado en exclusiva a trabajar y cuidar a su madre. Tampoco es que sea virgen, ni nada que se le parezca, ha tenido su cuota de diversión, pero se ha quedado solo en eso.

Aunque nadie, ni siquiera su mejor amiga Francisca la entiende, Pamela sigue la costumbre familiar de no decir nada de nada, en especial de las cosas más importantes y guardar un secreto es algo del todo imprescindible en su vida. Incluyendo el hecho de que, con sus cuatro amigas ya casadas, se siente cada día más sola.

Después de la muerte de sus padres, Octavio anhela compañía. Durante años se conformó con su grupo de amigos y su trabajo, por muy desagradable que le resulte. Una cena ocasional, alguna que otra visita al bar para beber una cerveza y reír un poco. Esa es su vida...

Hasta que un día aparece frente a él la mujer más bella que ha visto nunca, una visión sublime y ardiente: pelo rojo, labios llenos y muchas, muchas curvas.

La mosca en la sopa es que Pamela no quiere nada con él. Es decir, nada serio, porque bien que se presta para algunos juegos muy... entretenidos.