1. Un Rufián para la Dama
Quintus MacLachlann era arrogante, y no se arrepentía de serlo.
Cuando le pidieron que se hiciera pasar por un hombre casado para infiltrarse en la sociedad de Edimburgo, disfrutó del desafío de estar «casado» con la testaruda aunque hermosa Esme.
Esme no disimulaba su desprecio hacia aquel canalla vanidoso.
Era la última persona sobre la tierra con la que podía imaginarse casada, fuera verdad o no.
Pero, mientras se veía obligada a hacerse pasar por la esposa de aquel gandul, sus sentimientos hacia él comenzaron a cambiar
2. La Heredera Escocesa
La rica heredera lady Moira MacMurdaugh acababa de exhalar un suspiro de alivio por evitar un desastroso matrimonio con un hombre jugador y mujeriego cuando le ponen una denuncia.
Dividido entre el deber y esa impulsiva belleza que lo excita y distrae, el abogado Gordon McHeath no tiene otra alternativa que enfrentarse a la mujer cuyos besos nunca ha olvidado.
Hasta que siniestras fuerzas amenazan con acabar con el mundo de lady Moira, y Gorn debe arrojar a un lado las leyes.